Terapia Focal

¿Qué es la Terapia Focal?

Tratar el tejido afectado preservando el sano

La Terapia Focal se centra en tratar solo el área afectada por el cáncer dentro de la próstata, en lugar de someter a todo el órgano a tratamientos más invasivos. Con un procedimiento y una anestesia muy similar a una biopsia de próstata, se preserva más tejido prostático sano, lo que conlleva menos efectos secundarios y una recuperación más rápida. Los beneficios de la terapia focal incluyen la preservación de la función sexual y de la continencia urinaria, además de permitir que el paciente retome su actividad diaria de manera casi inmediata.

Este tratamiento mínimamente invasivo de la región afectada de la próstata tiene como objetivo la curación de la enfermedad y mantener la calidad de vida prácticamente intacta. Garantizar una seguridad oncológica es prioridad al elegir el tratamiento de un cáncer, por ello, la aplicabilidad de la terapia focal es restringida a casos seleccionados.

¿En qué consiste?

Resonancia y ecografía en tiempo real

El procedimiento se lleva a cabo tras la detección del tumor con biopsia por fusión de imágenes. El tratamiento de la lesión diana que ofrecemos en ISPRO se realiza utilizando un dispositivo especial (Robot Artemis) que combina la resonancia magnética y la ecografía realizada en tiempo real. La fusión de estas imágenes funciona como un chequeo doble del área sospechosa al combinar la visión del Radiólogo experto en resonancia de la próstata que previamente marca la zona afectada y la imagen generada por el Urólogo en quirófano.

El dispositivo Artemis se implantó en Creu Blanca en 2018. Desde entonces, se han realizado más de 1500 biopsias por fusión de imágenes y esta gran experiencia ha allanado el camino para que el tratamiento se realice con la misma precisión.

Tratamiento focales de cancer de prostata

Técnica

HIFU (High-Intensity Focused Ultrasound)

Tradicionalmente se utiliza para tratar algunos tipos de cáncer, tumores sólidos, entre ellos el cáncer de próstata. Esta técnica utiliza ondas de ultrasonido para destruir las células cancerosas de la próstata. La precisión del HIFU permite focalizar la energía en áreas específicas, minimizando así el daño a tejidos circundantes.

I.R.E. (electroporación irreversible)

Esta técnica consiste en la aplicación controlada de pulsos eléctricos intensos a las células cancerosas. Estos pulsos crean poros en la membrana celular, llevando a la pérdida irreversible de la integridad de la membrana y causando la muerte celular. Este enfoque busca destruir selectivamente las células cancerosas mientras preserva los tejidos circundantes. La electroporación irreversible destaca por su especificidad y capacidad para tratar tumores localizados, mostrando promisorios avances en el campo de la terapia focal al minimizar los efectos secundarios y preservar las funciones normales del órgano afectado. Además, su gran ventaja es que no es una terapia térmica, es decir no actúa mediante aumento de la temperatura en el tejido.

F.L.A. (Focal Laser Ablation)

La ablación por implica el uso de energía láser para destruir selectivamente las células cancerosas. Guiado por imágenes de alta resolución, el láser se dirige con precisión a las áreas afectadas, generando calor que desencadena la coagulación y
destrucción de las células malignas. Este enfoque minimiza el impacto en los tejidos
circundantes, preservando las funciones normales. La ablación por láser destaca por su capacidad de tratamiento focal, reduciendo efectos secundarios y ofreciendo una opción terapéutica menos invasiva para pacientes con cáncer de próstata localizado.

Crioterapia

La crioterapia implica el uso de temperaturas extremadamente bajas para congelar y destruir las células cancerosas. Los avances tecnológicos han permitido un control
más preciso de la temperatura, mejorando la efectividad y reduciendo los riesgos asociados.

Resonancia y ecografía de Prostata

El procedimiento

Siendo capaces de localizar el área enferma y de llegar a ella con precisión sin afectar el tejido cercano sano, el urólogo experto en cáncer de próstata tiene que determinar si el tipo de tumor es susceptible a este tratamiento mínimamente invasivo. Garantizar una seguridad oncológica es prioritario para elegir el tratamiento de un cáncer, por ello, la terapia focal solo puede realizarse en casos seleccionados.  La decisión de qué energía utilizar para esta finalidad se basa en
la localización de la lesión, tamaño, proximidad de otras estructuras y características del propio paciente.

Abordaje Transrectal

El HIFU la localización de la zona de la próstata enferma y la aplicación de la energía direccionada a dicha area se realiza por vía transrectal o anal. Con la tecnología HIFU se realiza una fusión de imágenes de la Resonancia Magnética y de la Ecografía realizada en este caso con el equipo del HIFU. La fusión de dichas imágenes y el transductor que a la vez obtiene las imágenes y emite los ultrasonidos de tratamiento permite un control real a cada segundo del área que se está tratando.

Abordaje Transperineal

Los tratamientos con IRE, FLA y Crioterapia se realización a través de una punción
transperienal similar a la realizada durante la biopsia de próstata, es decir, en la piel entre el escroto y el ano. La diferencia consiste en que al introducir la aguja se aplica la energía deseada a través de este acceso para destruir las células del área afectado por el tumor y se evita el paso de material quirúrgico a través del ano.

Nuestro consejo sería que busquen la opinión de un urólogo especializado en cáncer de próstata y terapia focal para discutir todas las opciones de tratamiento disponibles y determinar la mejor opción para su situación específica. También es importante que comprendan completamente los posibles beneficios y riesgos asociados a las alternativas terapéuticas y que tomen una decisión informada junto con sus familiares.

FAQ

Preguntas Frecuentes

¿Es frecuente la pérdida de orina posterior a la cirugía prostática?

La pérdida de orina después de la cirugía prostática radical es común, especialmente en las semanas o meses posteriores a la intervención. La cirugía de próstata radical, la prostatectomía, puede afectar los músculos y nervios que controlan la función urinaria. La incontinencia urinaria puede variar en grados, desde pequeñas pérdidas al toser o estornudar hasta una incontinencia más significativa. En el caso de la cirugía endoscópica por láser, la incontinencia habitualmente es muy leve y mejora a las pocas semanas de la cirugía.

El grado de incontinencia suele mejorar con el tiempo a medida que los músculos se recuperan y el paciente realiza ejercicios de rehabilitación del suelo pélvico. En algunos casos, la incontinencia persistente puede requerir tratamiento adicional, como terapia física, medicamentos o incluso cirugía reconstructiva.

La cirugía prostática robótica ofrece un claro beneficio respeto a la cirugía laparoscópica o abierta en este aspecto, con una recuperación funcional más temprana y satisfactoria.

¿Cuándo debería revisar la próstata?

La revisión de la próstata es crucial para la salud masculina. Se recomienda que los hombres comiencen a realizar exámenes de próstata a partir de los 50 años, aunque aquellos con antecedentes familiares deben considerarlo a los 45. Los chequeos regulares, como el examen de antígeno prostático específico (PSA) y el tacto rectal, permiten detectar problemas en etapas tempranas, incluyendo el cáncer de próstata. La detección precoz aumenta las posibilidades de tratamiento exitoso. Consultar con un urólogo es fundamental para establecer un plan de revisión personalizado. ¡Priorizar la salud prostática es clave para una vida plena y activa!

Sangre en la orina, ¿cuáles son sus causas?

La presencia de sangre en la orina, conocida como hematuria, puede indicar diversas condiciones médicas. Entre las posibles causas se incluyen infecciones urinarias, cálculos renales, traumatismos, inflamación de la vejiga o próstata, e incluso tumores. La hematuria puede ser visible a simple vista o detectarse mediante análisis de laboratorio. Ante este síntoma, es crucial buscar atención médica para realizar pruebas diagnósticas y determinar la causa subyacente. Un diagnóstico temprano es clave para un tratamiento efectivo. Si experimentas sangre en la orina, no dudes en consultar a nuestro equipo de urólogos especializados.

Molestias al orinar, ¿a qué puede deberse?

Las molestias al orinar en hombres adultos pueden ser señales de problemas urológicos comunes. La prostatitis, una infección con inflamación de la próstata, y la hiperplasia benigna de próstata (HBP) son causas frecuentes. Otros factores incluyen infecciones urinarias, piedras en el tracto urinario o incluso cáncer de próstata. Es esencial buscar atención médica si experimentas dolor, ardor o cambios en la frecuencia urinaria. En ISPRO Barcelona, ofrecemos servicios especializados para el cuidado urológico. Nuestros expertos pueden evaluar y abordar eficazmente estas molestias, garantizando tu bienestar. ¡Prioriza tu salud urológica hoy!

Impotencia, eyaculación precoz y falta de deseo, ¿cómo tratarlo?

La impotencia, eyaculación precoz y falta de deseo, pueden abordarse mediante diversas estrategias terapéuticas. La impotencia puede tratarse con medicamentos, dispositivos de vacío o cirugía en casos extremos. Para la eyaculación precoz, la terapia psicológica, ejercicios de control y, en algunos casos, medicamentos, pueden ser efectivos. La falta de deseo puede requerir un enfoque multifacético que involucre terapia sexual, cambios en el estilo de vida y exploración de factores psicológicos subyacentes. La comunicación abierta con la pareja es crucial. La consulta con profesionales de la salud, como urólogos y sexólogos, permite un abordaje personalizado para cada situación. La clave reside en buscar ayuda temprana y colaborar con expertos para recuperar una salud sexual plena y satisfactoria. Recupera tu vitalidad sexual y bienestar en ISPRO Barcelona. ¡Consulta con nosotros para encontrar la solución adecuada y recuperar una vida sexual plena!

¿Cual es la mejor técnica de biopsia prostática?

La elección de la mejor técnica de biopsia prostática depende de la situación clínica específica. La biopsia de próstata transrectal es común, donde se extraen pequeñas muestras de tejido a través del recto. Sin embargo, la biopsia de fusión, que combina imágenes de resonancia magnética nuclear (RMN) con ultrasonido transrectal, ha mejorado la precisión al dirigir áreas sospechosas. Esto reduce biopsias innecesarias y mejora la detección de cánceres agresivos. Otras técnicas emergentes incluyen la biopsia transperineal, que accede al tejido a través de la piel entre el escroto y el ano. La elección precisa depende de la evaluación médica y de la experiencia del equipo médico para determinar la mejor estrategia de diagnóstico en cada caso. En ISPRO, realizamos la biopsia por fusión transperineal, pues reduce el riesgo de infecciones prácticamente a zero.

¿Cómo saber si he expulsado una piedra o arenilla?

La expulsión de piedras o arenilla en el tracto urinario puede causar síntomas notables. Si experimenta dolor repentino y agudo en la parte baja del abdomen o en el costado, acompañado de náuseas, vómitos, o sangre en la orina, podría indicar la presencia de cálculos renales. La sensación de querer orinar con frecuencia o experimentar dolor al hacerlo también puede estar relacionada. La observación directa de pequeñas partículas en la orina puede indicar la expulsión de arenilla, aunque en la mayoría de ocasiones no observaremos como se elimina la piedra.

Si sospecha la presencia de cálculos, es crucial buscar atención médica. Los profesionales de la salud pueden realizar pruebas, como análisis de orina y estudios de imagen, para confirmar la presencia de cálculos y determinar el tratamiento necesario. La automedicación no es recomendable, ya que la gestión adecuada depende de la evaluación médica.

¿Qué significa tener el PSA elevado?

Un nivel elevado de antígeno prostático específico (PSA) en el análisis de sangre puede indicar diversas condiciones, siendo el cáncer de próstata una preocupación principal. Sin embargo, el PSA elevado no es un diagnóstico definitivo y puede deberse a otras causas, como inflamación prostática o hiperplasia benigna de próstata. Es esencial que un profesional de la salud interprete los resultados, considere la historia clínica y realice pruebas adicionales, como la biopsia de próstata, para confirmar o descartar problemas graves. Un PSA elevado puede ser una señal de alerta, pero solo una evaluación completa determinará la causa subyacente.

La sintomatología del tracto urinario inferior (STUI) es muy variable y su inicio puede ser muy insidioso. Los síntomas que nos deben alarmar son:

  • Sangrado en la orina (hematuria)
  • Imposibilidad para orinar
  • Escapes urinarios importantes

En general estos síntomas son poco frecuentes. Ante micciones muy frecuentes que impiden realizar la actividad normal, la aparición súbita de urgencia miccional o la necesidad de levantarse muchas veces por la noche (noctúria) se recomienda consultar al especialista.

¿Cuándo debería revisar la próstata, en concreto el PSA?

La recomendación de realizar una analítica de PSA varía según los factores de riesgo de cada persona y, generalmente, los urólogos la indicamos principalmente durante las revisiones urológicas. Pero en líneas generales podemos decir que:

1. A partir de los 50 años. Aunque si tienes un mayor riesgo debido a antecedentes familiares de cáncer de próstata, padre o hermano con cáncer de próstata, es recomendable comenzar las pruebas a partir de los 40-45 años.

2. Si experimentas síntomas urinarios como dificultad para orinar, micción frecuente, sangre en la orina o dolor en la región pélvica.